Bolivia: Rodrigo Paz Pereira asume con un giro al centro

Rodrigo Paz Pereira, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), fue electo presidente de Bolivia tras imponerse en el balotaje, marcando un giro político en el país tras dos décadas de polarización. Su lema de campaña, “capitalismo para todos”, propone un modelo de liberalismo moderado enfocado en destrabar el aparato estatal y fomentar un crecimiento económico con equidad, descentralización y eficiencia institucional.

El nuevo presidente plantea una reforma judicial, la digitalización del Estado y un esquema de distribución fiscal “50/50” entre el Gobierno central y las regiones. También impulsa una reforma constitucional para eliminar la reelección presidencial, apostando a un sistema político más equilibrado. Su discurso busca atraer al electorado moderado, urbano y desencantado, que no se sentía representado ni por el MAS ni por la derecha tradicional.

Paz Pereira se define como “un liberal con sensibilidad social” y promete un cambio sin polarización. Su irrupción en la escena nacional rompió el esquema binario dominante, capitalizando el desgaste del oficialismo y la ausencia de Evo Morales en la contienda. La propuesta de “cambio con resultados y sin odio” fue clave para captar a votantes indecisos que buscan una alternativa pragmática.

Crítico de los gobiernos del MAS, denunció el “despilfarro” de 60.000 millones de dólares en ingresos por gas y una deuda que supera los 40.000 millones. A pesar de este diagnóstico, reconoció que la estabilidad económica es un bien público que debe cuidarse. Su mayor desafío será traducir sus propuestas en políticas concretas, sin provocar desequilibrios, en un contexto donde el margen para errores es reducido.