Gobierno y gobernadores: gestos políticos, tensión latente y vetos en puerta

El ministro del Interior, Guillermo Francos, participó anoche de un encuentro en La Rural convocado por la Sociedad Rural Argentina, al que asistieron varios gobernadores. Aunque su presencia fue leída como un gesto político, desde el Gobierno aclararon que no se trató de una instancia formal para resolver reclamos provinciales. La reunión fue cordial, pero no dejó compromisos concretos ni planes inmediatos para profundizar el diálogo.

Mientras tanto, las negociaciones con las provincias siguen estancadas. En la Casa Rosada aseguran que no hay apuro y que aún no se fijó fecha para el tratamiento en Diputados de los proyectos que preocupan a los mandatarios, como los vinculados al Impuesto a los Combustibles y Aportes del Tesoro Nacional (ATN). Las comisiones no fueron convocadas y el debate se postergaría hasta después del receso invernal.

El próximo lunes se reunirá el Consejo de Mayo, con la participación del gobernador mendocino Alfredo Cornejo en representación de las provincias. Desde el Ejecutivo confirmaron que mantendrán en reserva los temas tratados y que los resultados se comunicarán recién a fin de año, con el objetivo de evitar interferencias políticas en la dinámica del consejo.

El Gobierno ya anticipó que, si avanzan los proyectos impulsados por las provincias, serán vetados por el presidente Javier Milei. En el oficialismo creen que los reclamos tienen más motivaciones políticas que económicas y aseguran que la respuesta seguirá siendo también política. A pesar de los gestos, el vínculo entre Nación y gobernadores atraviesa su momento más tenso desde el inicio de la gestión.