En tiempos de crisis, las palabras mesuradas, sin odios y con propuestas, son valiosas
La gente está cansada de las palabras agresivas, hirientes, en tiempos de campañas políticas. Porque la está pasando mal y porque necesita ideas y no golpes. Y cuando tiene oportunidad, valora a los que apuestan y no a los que odian. Esa oportunidad son las urnas