
El ministro mendocino aseguró que el organismo no dejará de operar, sino que atravesará una etapa de reorganización. Advirtió que las funciones clave seguirán en manos del Estado.
El esperado cambio de tiempo finalmente se hizo sentir este Viernes Santo en Mendoza. Tal como lo anticipó el pronóstico, la jornada amaneció con un marcado descenso de la temperatura y la llegada de lluvias en distintas zonas de la provincia.
Las primeras gotas comenzaron a caer desde temprano, y aunque por momentos las precipitaciones fueron intermitentes, marcaron un contraste importante con los días calurosos de la semana. La Dirección de Contingencias Climáticas ya había adelantado que se esperaban condiciones inestables y un leve alivio térmico, algo que terminó por cumplirse.
En el Gran Mendoza, en el dia de ayer, la nubosidad se mantuvo durante gran parte del día y las temperaturas no superan los 20 grados, una pausa refrescante en medio del otoño mendocino. También hubo reportes de lluvias en zonas del Valle de Uco y el Sur provincial.
Para los próximos días, el tiempo seguiría inestable, con probabilidad de más lluvias y temperaturas moderadas. Se recomienda a la población estar a los informes oficiales para planificar actividades al aire libre durante el fin de semana largo.
El ministro mendocino aseguró que el organismo no dejará de operar, sino que atravesará una etapa de reorganización. Advirtió que las funciones clave seguirán en manos del Estado.
La actividad forma parte del proyecto #EnergíaJoven, que busca llegar a más de 10.000 estudiantes en tres provincias.
Agustin Martinez Haarth forma parte del equipo ganador de la competencia internacional de proyectos aeroespaciales.
Tras la difusión de un video con declaraciones polémicas, el ministro aseguró que sus palabras fueron sacadas de contexto y defendió la estabilidad económica.
Las obras comprenden el tramo entre Belgrano y 25 de Mayo e incluyen mejoras en veredas, calzada, alumbrado y equipamiento urbano.
Jubilaciones, moratoria y discapacidad: el bloque opositor avanzó sin trabas ante un oficialismo fragmentado; la Casa Rosada reacciona con amenazas de veto y judicialización.